12/8/16

Maleta cerrada. INVOLVE. Día -1

Repaso por enésima vez la maleta y esa sensación de “algo se me olvida” no desaparece. La ropa está, los cuadernos están... Están los libros que no volverán… Las vibraciones del teléfono no paran desde hace rato con los mensajes que llegan desde Glasgow, desde Valencia, desde Bilbao... ¿A todos se nos estará olvidando algo? Entonces, como una advertencia, el siguiente mensaje llega desde Sao Paulo.

    A miles de kilómetros, en Campinas, las imágenes de risas y músicas que llenan la pantalla narran una despedida que suena a agradecimiento mutuo. Unos han ido allí a intentar abrir puertas y ventanas hacia un futuro mejor y otros han abierto sus casas para recibir la esperanza. Todos, sin duda, han abierto sus corazones. Los compañeros y compañeras de INVOLVE en Brasil, después de quince días de entrega, están cerrando la primera etapa de esta aventura solidaria que, para mí, ha de comenzar mañana en Ciudad de México. Aunque lo importante, en ambos lugares, vendrá después, cuando se comiencen a levantar los cimientos que nosotros vamos a iniciar.

    La sensación de olvido ha desaparecido. Lo que no recordaba ya lo llevaba puesto: una inmensa ilusión con la que ofrecer lo que puedo dar. Ya puedo cerrar la maleta.